El pie de atleta es una afección que no tiene edad, género ni condición social, afecta a todos por igual. Se caracteriza por afectar principalmente los pies, con picazón, descamación, y heridas por resquebrajamiento de la piel, en forma avanzada puede producir heridas sangrantes, con la consiguiente infección. Por lo tanto el tramiento dependerá del avance de ésta.
Es muy común el contagio por contacto, sea en duchas ó lugares públicos, en estos casos se deberá extremar las medidas de precaución.
Sugerencias: en caso de contraerla se deberá extremar la higiene de la zona, no tocar con las uñas puesto que está se podría diseminar por otras partes del cuerpo, sea axilas, ingle, vagina, pene (es decir lugares de alta humedad), mantenerla muy seca, y utilizar antimicóticos que contengan clotrimazol, econazol, terbinafina, entre otros. En el caso de estar avanzada y estar acompañada por heridas, sería conveniente utilizar aquellos medicamentos que contengan algún corticoide, asociado con antibiótico tópico y el antimicótico principalmente. También usar elementos de baño personalizados como ser jabón, champú, toallas o toallones, que no sean usados por otros miembros de la familia para evitar su propagación. Es aconsejable que una vez remitido el cuadro clínico, no discontinuar su uso por un tiempo para evitar su reincidencia. Usar ojotas en caso de uso de duchas públicas (por ejemplo gimnasio, sauna, etc.), como así también un exhaustivo cuidado de los pies, y de las uñas. Quiero hacer un paréntesis respecto de las uñas, cuando se ven afectadas puede que se las observe deformadas, aún desde su nacimiento, en éste caso se deberá recurrir a las lacas antimicóticas, puesto que tienen la capacidad de atravesar la queratina de uña, siendo mucho más efectivas que las cremas, lociones, polvo, solución, que poseen poca penetración de la misma. En otros casos muy difíciles de tratar de forma local, será necesario utilizar antimicóticos por vía oral (fluconazol 150 mg.), el tratamiento y el tiempo del mismo será indicado precisamente por un dermatólogo.
Es muy común el contagio por contacto, sea en duchas ó lugares públicos, en estos casos se deberá extremar las medidas de precaución.
Sugerencias: en caso de contraerla se deberá extremar la higiene de la zona, no tocar con las uñas puesto que está se podría diseminar por otras partes del cuerpo, sea axilas, ingle, vagina, pene (es decir lugares de alta humedad), mantenerla muy seca, y utilizar antimicóticos que contengan clotrimazol, econazol, terbinafina, entre otros. En el caso de estar avanzada y estar acompañada por heridas, sería conveniente utilizar aquellos medicamentos que contengan algún corticoide, asociado con antibiótico tópico y el antimicótico principalmente. También usar elementos de baño personalizados como ser jabón, champú, toallas o toallones, que no sean usados por otros miembros de la familia para evitar su propagación. Es aconsejable que una vez remitido el cuadro clínico, no discontinuar su uso por un tiempo para evitar su reincidencia. Usar ojotas en caso de uso de duchas públicas (por ejemplo gimnasio, sauna, etc.), como así también un exhaustivo cuidado de los pies, y de las uñas. Quiero hacer un paréntesis respecto de las uñas, cuando se ven afectadas puede que se las observe deformadas, aún desde su nacimiento, en éste caso se deberá recurrir a las lacas antimicóticas, puesto que tienen la capacidad de atravesar la queratina de uña, siendo mucho más efectivas que las cremas, lociones, polvo, solución, que poseen poca penetración de la misma. En otros casos muy difíciles de tratar de forma local, será necesario utilizar antimicóticos por vía oral (fluconazol 150 mg.), el tratamiento y el tiempo del mismo será indicado precisamente por un dermatólogo.
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