domingo, 30 de agosto de 2009

CAMAS SOLARES


Según se advierte en estudios realizados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), la probabilidad de contraer cáncer de piel a través de las camas solares crece un 75% si se usan antes de los 30 años. Poco a poco se fue cambiando el concepto de bronceado, de la persona que trabaja bajo el sol a ser sinónimo de símbolo de salud, de relax, de vacaciones. Lo que llevó al aumento del uso de camas solares, y paralelamente el aumento de cáncer de piel. Esta terminantemente prohibido su uso a menos de 18 años.

Estas camas solares tienen una selección de la radicación solar que penetra más, broncea más y problamente dañe más, que la luz solar, puesto que la exposición a éstos rayos, sea la distancia, la duración y la intensidad favorecen la agresión. Se trata de la parte de la luz visible y los rayos ultravioletas, especialmente A y B (éste último es el más agresivo, es el que quema la piel y provoca cáncer). Esta exposición de luz UV se acumula con la vida, lo que acelera los efectos del envejecimiento, provoca manchas, arrugar precoces y favorece el cáncel de piel.

Cuanto más joven, las probabilidad de desarrolar cáncer aumentan. El melanoma, el que viene de los lunares está relacionado con las quemaduras solares en la infancia. La radiación UV tiene efecto retardado y éste puede aparecer recién a los 30 años de su exposición.

La liberación de endorfinas que la radicación solar genera produce una sensación de euforia similar a cuando se tiene sexo o se come chocolate.

Por otro lado, hay que tener en cuenta que el sol activa la vitamina D en la piel, importante para el metabolismo del calcio (esencial para los huesos), afianza la fuerza muscular y mejora el aspecto de la piel con acné, psoriasis o vitiligo. También tiene injerencia sobre el estado de ánimo de las personas.

Consejos: se desaconseja su uso regular, consultar al médico quien las usa habitualmente, tener especial cuidado las personas muy blancas, rubias y pelirrojas porque pueden contraerlo con mayor facilidad.

sábado, 15 de agosto de 2009

FIBROMIALGIAS


Es una enfermedad que afecta a mujeres en edad adulta. Si bien genera dolor y molestias crónicas, es amplio el tratamiento efectivo y a medida de cada paciente. Es un cuadro de dolor crónico generalizado que afecta sobre todo al múculo esquelético, asociado a trastornos del sueño, fatiga, cefalea, envariamiento matinal articular, parestesias y ansiedad severa. Afecta en mayor proporción a las mujeres que a los hombres, y es más habitual entre los 20 y 50 años de edad, pero puede haber casos en personas más jóvenes y hasta niños. La evaluación del dolor muscular, se realiza en diferentes zonas del cuerpo: occipucio bilateral, cervical bajo bilateral, trapecio bilateral, supraespinoso bilateral, supraespinoso bilateral, segunda costilla bilateral en la unión condrostal, epicóndilo lateral bilateral, glúteo bilateral, trocánter mayor bilateral, rodilla bilateral. Es frecuente que los pacientes se presenten con dolor lumbar bajo, que irradia a nalgas y muslos, y dolor y rigidez de cuello y hombros. Se tiene una sensación de tumefacción articular, aunque no hay artritis ni derrame articular. Los síntomas dolorosos empeoran con el frío y la humedad y con el estrés y el mal dormir. Hay trastornos cognitivos, cefaleas tensionales o tipo migraña con mareos. Frecuentes los trastornos del sueño, se despiertan varias veces durante la noche. Esta enfermedad puede estar asociada con colon irritable, vegiga irritable, dismenorrea, síndrome premestrual, síndrome de piernas inquietas, dolor en la articulación temporomandibular, dolor pelviano crónico, dolor torácico no cardíaco, dispepsia. Se cree que la enfermedad se debe a un procesamiento anormal del dolor a nivel central. Consejos: El tratamiento: farmacológico: utiliza drogas antiinflamatorias no esteroideas ( no abusar de ellos ya que pueden provocar alto riesgo de homorragias digestivas, e insuficiencia renal crónica por nefritis intersticial.), opiáceos (tramadol), raloxifeno (disminuye el dolor, mejora la fatiga y el rendimiento cotidiano), modafinilo (por la mañana mejora la fatiga y el trastorno cognitivo), pra mejor el sueño las benzodiacepinas (clonazepam), zolpidem (inductores del sueño), antidepresivos (para mejorar el cuadro), gimnasia, acupuntura (en algunos casos).

HEPATITIS B


Es una infección producida por el virus de la hepatitis B (Vhb) que ataca al hígado, puede volverse crónica y causar cirrosis, cáncer de hígado o insuficiencia hepática. Se trata de una de las infecciones de transmisión sanguínea y sexual de mayor crecimiento en la región.

Este virus es cien veces más infectivo que HIV y diez veces mayor que el de hepatitis C. Hay mayor prevalencia en la población adulta a pesar de la creciente prevención por la vacuna.

Esta infección suele cursar sin síntomas, y a menudo no se detecta hasta que ya se está en las instancias finales. Se estima que el 2% de la población latinoamericana padece hepatitis B crónica.

Las principales propuestas se destaca en la vacunación universal de recién nacidos, preadolescentes y adultos en riesgo, detección de personas en riesgo, tratamientos de infectados con el virus, educación a agente sanitarios y población en general.

La elección de tratamiento va a depender de las características del paciente, del estadío de la lesión hepática y de las características del virus, que deben ser evaluadas por los especialistas en esta materia.

Consejos: Vacunar a toda la población (vacunación universal), para evitar la hepatitis B. Efectuar el test de detección para identificar a las personas que puedan tener la infección crónica, pertenecientes a grupos de riesgo. Una vez hecho el diagnóstico, el tratamiento debe ser individualizado. Gracias a los medicamentos disponibles es posible evitar la evolución de la enfermedad, incluso el trasplante de hígado.

Los principales factores de riesgo para contraer la infección son: Madre, hermanos o contactos sexuales VHB positivos, uso de drogas inyectables, hemodiálisis, transfusión, piercing o tatuajes, VHI positivo.

Será necesario educar a los profesionales de la salud para que le pidan el test para detectar la hepatitis a la población de riesgo, sobre todo porque es una enfermedad asintomática que puede progresar en silencio. Cuando la enfermedad se manifiesta puede ser ya tarde.

miércoles, 5 de agosto de 2009

ALERGIAS ESTACIONALES


Aunque la primavera es una de las estaciones más esperadas del año, también puede traer aparejados contratiempos, el polen de las flores, el calor y la humedad son el caldo de cultivo de todo tipo de alergias respiratorias. Se suman también los ácaros (presente en los lugares donde hay humedad y calor, como alfombras, lugares demasiados calefaccionados, donde se acumulan como pullóveres, diarios y libros viejos, también no hay que olvidar la polución ambiental, como la combustión de automóviles que producen irritación de las vías aéreas, lo que favorece la entrada de alergenos, esta incidencia se reduce abruptamente en lugares abiertos como el campo, donde el índice de asmáticos es muy reducido. Por ejemplo en una casa deshabitada por mucho tiempo es común que se produzcan estornudos porque allí han proliferado los ácaros, no sólo se aspiran los ácaros sino también sus deyecciones que provocan una reacción alérgica en el epitelio bronquial desencadenando todo un proceso inflamatorio, si van a parar a la nariz se produce una rinitis, si atacan la conjuntiva provocan picazón ocular y si llega a los bronquios se deriva en un asma. Hay más pacientes con rinitis o congestión nasal de las vías aéreas altas.

Hoy se sabe que las alergias son debidas a un gen, el cual puede identificarse el código genético, pero no siempre se manifiesta si no se está expuesto al alergeno que la provoca. Los más afectados son los habitantes de las ciudades porque son lugares cerrados y se esta más expuesto a la contaminación ambiental.


Para llegar a un diagnóstico el paciente debe ser sometido a un exhaustivo interrogatorio, si tiene plátanos, si usa alfombras, si tiene humedad en las paredes, si tiene animales domésticos (ya que el epitelio de algunas mascotas como el gato esta asociado muchas veces a la alergia). Se debe someter a una prueba de alergia, que se hace en los brazos para conocer las sustancias a las que es alérgico el paciente. Después siguen las mediciones de sangre con la incorporación de una inmunoglobulina específica para distintos tipos de agentes. Muchos médicos optan por dar vacunas para la alergia, otros por el uso de antihistamínicos u otros antiinflamatorios. Los antihistamínicos de nueva generación que no producen sueño, a los que se puede asociar con sustancias vasoactivas en los casos de mucha congestión. Los antihistamínicos son ahora de acción prolongada y una dosis diaria es suficiente. Estos son menos efectivos en los casos de asma, donde se prefiere recurrir a los antiinflamatorios inhalados, que son corticoides. También hay broncodilatadores de acción prolongada y un grupo de inhibidores de los leucotrienos.

Consejos: Prevención: se recomienda el uso de cubre almohadas, cubrecolchas antialérgicos para evitar que los ácaros se estacionen allí, el uso de barbijos cuando se hace la limpieza de la casa y se aconseja no utilizar el plumero o el escobillón para quitar el polvo de los muebles, sino un trapo húmedo o la aspiradora.

martes, 4 de agosto de 2009

DIGESTIÓN


Comer es una cosa, pero saber comer es algo diferente. La vida moderna nos lleva a incurrir en excesos y carencias que atentan contra la buena salud. Una mala digestión puede traducirse en acidez, boca pastosa, hinchazón, gases, flatulencias, puntadas, todos pueden ser síntomas de un problema gástrico y llegar a ser futuras enfermedades gástricas, intestinales o hepáticas. Hay que comer razonablemente en horarios adecuados para tener una buena digestión y respetar las cuatro comidas diarias. Evitar en lo posible el consumo excesivo de alcohol y de grasas.

Las enfermedades más comunes dependen de la edad: En la infancia, lo más frecuente son las diarreas. En el adulto hay que pensar como una patología muy importante la posibilidad de tener pólipos en el intestino, divertículos y cáncer de colon. Por lo tanto todo individuo que pierde sangre por el recto después de los 50 años, debe ser estudiado para descartar un cáncer de colon.

También la acidez puede ser múltiple. Tal vez la más importante sea la presencia de una úlcera en el duodeno o en el estómago. Las causa de las úlceras puede ser doble: la presencia de una bacteria que se llama helicobacter pilory y la otra la ingesta de sustancias que son capaces de dañar la mucosa gástrica, como drogas llamadas antiinflamatorios no esteroides, también el consumo de sustancias que favorecen la secreción de ácido clorhídrico como el café, lo picantes, el mate.

El reflujo gastroesofágico, que ocurre cuando el contenido del estómago entra en contacto con la mucosa del esófago irritándolo y provocando una esofagitis. Si este reflujo ocurre durante la noche puede llegar a los bronquios y provocar importantes problemas.

El peor enemigo que tiene el paciente es la automedicación o la consulta a algún pariente o amigo creyendo que el problema que éste padece es similar al nuestro. Error, consultar al médico, que podrá disernir entre una comilona ó un problema más grave.

En principio, sería hacer una vida sana y una dieta razonable para evitar todo tipo de complicaciones. Si el problema es ocasional, puede ser producto de una indigestión. Pero si los síntomas son recurrentes, hay que ir a la consulta con el médico.

Una digestión normal se produce de entre dos y tres horas después de la comida. Sería aconsejable caminar, comer poco volumen sobre todo si se tiene dificultades de evacuación gástrica, digestión lenta. Cuando se trabaja hay que tratar de no cargar el estómago. También el exceso puede traer somnolencia, síntoma muy común.

La comida principal debería ser al mediodía y cenar en forma más liviana y alejada del horario de la cama, dejando un espacio de tiempo e insistir con un desayuno muy fuerte.

Consejos: 1) Comer despacio, masticar bien y en un sitio tranquilo; 2) No comer en estado de ansiedad o nervios; 3) Comer debe ser un acto placentero; 4) evitar los "almuerzos de trabajo", no es el momento ideal para hacer un negocio; 5) Ir al baño cuando se tenga ganas, no reprimirse, evitar constiparse; 6) Comer sano, evitando excesos de picante y de sal; 7) Comer por lo menos cuatro veces al día y siempre con bajos volúmenes de ingesta; 8) Medirse el peso en forma frecuente para evitar el aumento y la obesidad.